Prestó un gran servicio a la ciudad hasta la inauguración de las comunicaciones telegráficas entre Ceuta y Algeciras en 1844.
Refiriéndose a este mismo lugar Ramos Espinosa de los Monteros nos dice: "En la parte central o Bab-er-riah, puerta de los vientos, continuaba el muro que procedía de la Torre del Heliógrafo; y daba entrada dicha puerta, a un barrio de casas y haciendas de jardines, que se llamó de los Tilos"
Sudera Blanes, también menciona la plácida alameda de los Tilos en este barrio, al que daría nombre.
Refiriéndose a este mismo lugar Ramos Espinosa de los Monteros nos dice: "En la parte central o Bab-er-riah, puerta de los vientos, continuaba el muro que procedía de la Torre del Heliógrafo; y daba entrada dicha puerta, a un barrio de casas y haciendas de jardines, que se llamó de los Tilos"
Sudera Blanes, también menciona la plácida alameda de los Tilos en este barrio, al que daría nombre.