En esta foto de 1930, podemos observar la gran plaza en la boca norte del Foso de la Almina por la esquina Oeste. Aquí estaba la ermita de San Juan de Dios, que dio nombre al lugar donde trabajó y durmió, siendo soldado de una de las compañías incorporadas en el Regimiento Fijo de esta plaza, cuando era portuguesa. En este mismo lugar, se veneró también a María Santísima del Carmen, en una pequeña capilla que llevaba su nombre.
Con anterioridad esta misma zona se conocía como Plaza de la Alhóndiga.